La Selección Mexicana Femenil ha ido a tres Mundiales oficiales
Está por iniciar la Copa del Mundo Australia-Nueva Zelanda 2023, pero la Selección Mexicana no asistirá, luego de la tragedia vivida en el Campeonato Concacaf 2022, del que además fue anfitriona, al no poder conseguir uno de los cuatro boletos directos o alguno de los espacios disponibles para el repechaje.
Sin embargo, más allá del trago amargo de no poder estar en el torneo más importante del balompié mundial, vale la pena recordar las veces que México sí lo ha conseguido.
De los nueve Mundiales que hasta ahora ha organizado la FIFA, la Selección Mexicana ha podido calificar a tres: Estados Unidos 1999, Alemania 2011 y Canadá 2015, aunque de ninguno ha regresado con buenos dividendos. Aquí un recuento:
La primera hazaña
La Copa del Mundo de Estados Unidos 1999 estableció varios hitos: récords de asistencia, mayor cobertura mediática, tanto en presencia de periodistas como por las transmisiones en televisión, era un evento al que todas las selecciones querían acudir y México lo consiguió, ¿cómo?
Como es costumbre, participó en el Premundial, un camino complicado porque para esa edición, que se jugaría con 16 escuadras, solo había un boleto en disputa para Concacaf (con Estados Unidos ya calificado como sede), por lo tanto, debía eliminar a una Canadá, que para entonces ya era poderosa.
La escuadra mexicana, comandada entonces por Carlos Pedrín, goleó 8-0 a Guatemala en semifinales, (con destacadas actuaciones de Maribel Domínguez e Iris Mora) pero en la disputa por el boleto en la gran final, cayó 1-0 ante las de la hoja de maple, por lo que tuvieron que ir al repechaje contra Argentina, en la última oportunidad.
En ese contexto, Leonardo Cuéllar tomó las riendas del equipo y encaró los partidos frente a las sudamericanas, el resultado fue favorable: México ganó ambos encuentros, el primero por marcador de 3-1 (en la entonces Bombonera, hoy Nemesio Díez) y el segundo 3-2 (en el estadio Amalfitani).
Fue el primer gran logro del futbol femenil en México de la era FIFA, ya que en los 70 ya había destacado en los Mundiales extraoficiales; no obstante, en el Mundial, el golpe fue duro, al volver a casa con tres derrotas a cuestas: 7-1 ante Brasil, 6-0 frente a Alemania y 2-0 contra Italia, 15 goles en contra y uno a favor, a cargo de Maribel Domínguez.
Más de una década de espera
La escuadra mexicana tomó la actuación en Estados Unidos 1999 como aprendizaje y durante los siguientes 10 años mostró que su futbol iba al alza, sin embargo, la competencia internacional era más férrea y no logró meterse a las Copas Mundiales de 2003 y 2007, en ambas ocasiones perdió ante Japón en repechajes, pero también en ambas se quedó a nada de conseguir el boleto, es decir, se notaba el crecimiento.
Dicha evolución se vio cristalizada en el 2010, con el mejor partido que ha jugado la Selección Mexicana en su historia: derrotó 2-1 a Estados Unidos en el Premundial celebrado en Cancún y con ello calificó a Alemania 2011, gracias a los goles de Domínguez y de Verónica Pérez.
Era la primera vez que México derrotaba a las estadounidenses, era la primera vez que las estadounidenses no calificaban directo a una Copa del Mundo, parecía que ese hito cambiaría al futbol femenil mexicano y, por lo menos, algo de aquello se notó en el Mundial, puesto que se consiguieron los primeros puntos, con el 1-1 ante Inglaterra y el 2-2 frente a Nueva Zelanda. La ilusión estaba creciendo.
El sueño se quedó a medias
Con lo hecho en Alemania 2011, la esperanza de que el futbol femenil mexicano creciera se hizo cada vez más fuerte, pero en el Premundial para Canadá 2015, las cosas no fueron sencillas, pues la escuadra todavía dirigida por Leonardo Cuéllar, no llegó a la gran final y tuvo que pelearse la calificación en el duelo por el tercer lugar ante Trinidad y Tobago, un partido que se complicó y tuvo que definirse hasta los tiempos extra para un 4-2 final a favor de las mexicanas.
El sufrimiento para calificar se reflejó posteriormente en el papel durante el torneo: el equipo mexicano empató 1-1 frente a Colombia, pero cayó 2-1 ante Inglaterra y fue goleado 5-0 por Francia.
Fue el inicio de dos procesos mundialistas que desembocaron en la no calificación, primero hacia Francia 2019 y el más doloroso el de Australia-Nueva Zelanda 2023, considerando que para este último había más boletos disponibles para Concacaf.
La mirada hacia adelante
Con el fracaso hacia el Mundial de este año, la Selección Mexicana busca encontrar la forma de reflejar en ella lo que a nivel Liga MX Femenil parece estar ganando, por ello, quiere estar en la siguiente Copa del Mundo e incluso ya levantó la mano para ser sede de la edición del 2027, en un trabajo en conjunto con Estados Unidos.
La apuesta de México es confiar en sus categorías juveniles, quienes en el 2018 consiguieron un subcampeonato del Mundo Sub-17 y en el pasado Mundial Sub-20 llegaron hasta los cuartos de final, al caer contra España, que a la postre fue la campeona.